Denisse, es una joven estudiante de Bachillerato Agropecuario, en Sonsonate; y becaria del Programa Colibrí.
De lunes a viernes, Denisse recibe clases en el instituto y comparte sus días con sus compañeros de clase; en un grupo de 11 estudiantes, ella es la única niña. Sin embargo, eso no es obstáculo para continuar aprendiendo y conociendo sobre el sector agropecuario, ella se siente bien, y piensa que siempre deben existir oportunidades para todos, sin importar el género.
“Al inicio mi familia no quería dejarme estudiar, porque decían que era un ámbito para hombres, pero insistí y cuando obtuve el apoyo de la beca, ellos se alegraron”, comenta Denisse.
Ahora, su familia, maestros y compañeros la apoyan para que continue luchando por sus sueños, porque desde pequeña, ella ama las plantas y está interesada por el cuido de los animales, además, le preocupa que el medio ambiente se esté degradando, y los suelos se estén erosionando, porque sabe que eso afecta principalmente a la seguridad alimentaria y a las familias rurales. Así que, desea aprender para ayudar a contrarrestar la problemática.
Antes de obtener la beca, Denisse participó en un curso de Barismo en la Escuela de Administradores de Fincas de Café, RENACER. Realizó 50 horas teórico-prácticas, y aprendió diferentes métodos de preparación de café.
Ella se siente contenta de poder ser partícipe de los cursos y de haber obtenido la beca, ya que le ayuda económicamente a costear sus viáticos y gastos de algunas actividades del instituto. Su propósito es estudiar mucho para conocer más y obtener buenas calificaciones, que le permitan mantener su beca, porque su meta a mediano plazo es continuar estudiando y ser ingeniera, una ingeniera que pueda implementar herramientas en pro del medio ambiente.
“La naturaleza es algo muy bonito, sí en algún momento uno se encuentra solo rodeado de ella, la experiencia es muy bonita; además, no solo es de quitarle al medio ambiente, sino también dar. Así como la naturaleza nos ayuda, nosotros también debemos ayudarle a ella, protegiéndola y respetándola”, comentó.
Por Katia Contreras